
En esta sesión vamos a aprender técnicas de lectura rápida que nos permitirán leer un libro en menos de una hora.
—¿Un libro entero en menos de una hora? Eso es imposible.
—No, no es imposible. He estado en una sala donde 100 personas lo conseguimos hacer, libro tras libro, día tras día, durante una semana. Todos lo conseguimos. Tengo fotos, vídeos, pruebas y testimonios.
—De todas maneras, ¿quién quiere leer un libro tan rápido? No se disfruta, no se comprende, no da tiempo a reflexionar lo aprendido, no se han escrito para usarlos así. El autor se revolvería en su tumba… bla bla.
—Ya, te entiendo perfectamente. Durante 40 años he pensado como tú, así que me sé todas esas respuestas. El tema es que me han cambiado radicalmente “las preguntas” que me hago antes de leer un libro. Y por eso, mis antiguas respuestas ya no me sirven. Ahora tengo otras respuestas mucho más poderosas.
—¿Y cómo puedes conseguirlo exactamente?
—Ah, ya veo: quizás ya no te parece algo “imposible”. Me alegra. Mira. no ocurrirá inmediatamente; necesitaremos entrenamiento para lograrlo. Pero todos podremos conseguirlo. Es una habilidad que se entrena, como tantas otras.
—Ya, pero es imposible disfrutarlo si lees a esa velocidad…
—De nuevo, primero tenemos que cambiar las preguntas que nos hacemos. Entonces cambiarán radicalmente las respuestas que obtengamos. Te aseguro que esa era la repuesta que más me costó cambiar a mí también; me aferraba a ella como un niño a su golosina preferida.
—Y ¿de verdad recuerdas lo que has leído a esa velocidad….?
—Esa parte te va a flipar, confía en mí. Veremos cómo podemos anclar los aprendizajes que extraigamos de cada libro, para que no se nos olviden y los tengamos siempre disponibles en nuestra memoria. Es como magia, pero no lo es.
Esta sesión es perfecta:
- Para quien hace lo que puede (malabarismos), con lo que tiene (mil responsabilidades) y se le escapan los días como granos de arena entre los dedos.
- Para quien siente que no tiene las respuestas importantes aún. Pero no tiene tiempo de buscarlas, porque la vida es frenética.
- Para quien se esfuerza mucho en su negocio, familia, profesión, pero al final del día no tiene tiempo para lo que le gustaría saber mejorar en su vida.
- Para quien disfruta de aprender cosas nuevas, pero no tiene más remedio que aprender en Twitter en el baño o en el autobús, porque no le da la vida para coger un buen libro y sentarse en un sofá de cuero con una infusión.
- Para quien sabe que las respuestas están en los libros, pero al final del día no consigue abrir un libro siquiera.
Qué pasará entonces:
Entenderás que hay muchos tipos de lectura, muy variados objetivos y por tanto muy variados procedimientos para leer un libro. Todo dependerá de lo que busques dentro de ese libro.
Vente y te enseñaré la entrada a esta madriguera 😊
Este contenido está restringido a los miembros de SinOficina. Accede o elige tu suscripción para verlo.